La mentira de Miguel Ángel Peña, supuesto militar, terminó de la peor manera luego de que su esposa lo denunciara por violencia doméstica. Cuando los agentes de la comisaría 6° de Itauguá intervinieron, se dieron cuenta de que en el auto del agresor había uniformes militares, pero resultó que el hombre nunca estuvo en la milicia. Todo era falso.
“Este hombre no solo robó cosas materiales, porque tiene 8 antecedentes, sino también el corazón de una mujer. La engañó con su porte militar, incluso llegó a casarse con todos los papeles”, explicó el comisario Emilio Alfonso.
La larga lista en el prontuario de Peña incluye causas pendientes por varias estafas, coacción sexual y amenazas de muertes. También había engañado a un militar activo a quien ofreció llantas deportivas, haciéndose pasar por coronel; este, creyendo que era su superior, accedió al negocio y le entregó G. 1.600.000, pero nunca más supo de él, hasta anoche.
El “falso militar” se encuentra detenido a disposición del Ministerio Público.