La rutina de la familia Barrientos ya casi vuelve a la normalidad, luego de que el fin de semana se llevaran el susto de sus vidas al ver que a la pequeña Aramí, de 2 años, la atacara “Pequeño”, un chancho de 130 kilos. “Ahora estamos siguiendo el tratamiento. Ella se hace curaciones todos los días. A primera vista, no tiene secuelas en los ojos”, contó don Milciades Barrientos, padre de la criatura.
Después del tremendo episodio, la idea de sacrificar al animal surgió como una opción. “Estoy pensando carnearlo. La mitad venderé a un asaditero que ya me pidió", explicó el hombre, oriundo de San José de los Arroyos. Agregó que el sábado decidirá. Ante esta posibilidad, Karo Medina, una voluntaria de “Salvemos Hocicos Py”, un refugio de animales, instó a la familia a no matar al chanchito.
“Somos un grupo de voluntarios que rescata normalmente perros y gatos, pero trabajamos mucho en la concientización del respeto hacia todos los animales”, explicó la joven. Añadió que no es la primera vez que rescatan a animales de corral, pero que tuvo que pagarle a los dueños. “En fin de año rescatamos a dos cabras y también a una gallina”, recordó.