EMOTIVA CARTA DE UN ALUMNO AFECTADO POR LA INUNDACIÓN
Familias piden ser reubicadas.
TRISTE
Juan es un joven de 13 años, preocupado por no volver a la escuela por la inundación.
Luego de terminar su trabajo como lustrabotas, un día más, a Juancito le toca remangarse los pantalones hasta las rodillas, teniendo en mente que su tía le advirtió que es una de las pocas prendas que se secaron en los últimos días. La prisa le juega en contra, pues en un par de horas debe almorzar, cambiarse e ir a la escuela Celsa Speratti, donde cursa el séptimo grado.
A pocos metros de llegar a su casa, demuestra gran equilibrio para no caer de las improvisadas pasarelas que los vecinos de la Chacarita armaron para cruzar el caudal que se formó con la crecida del río Paraguay.
PUENTE. Sobre tablas pasan el agua y la cloaca.
A pesar de que a Juancito no le gusta mucho Literatura, aunque le encantan las Matemáticas, le preocupa que el agua consuma su hogar cada vez más, y tener que ir a la escuela se va a hacer más complicado. “Si falto a la escuela es porque mi casa está en el agua. Si por ahí no me voy más es por eso”, dice parte de la carta que el inocente niño dirigió a sus profesores.
El pequeño de 13 años vive con su tía Ramona Galeano, a quien le dice mamá. Esta y alrededor de 50 familias más están desesperadas porque el agua se apoderó de sus casa y nadie se acercó a ayudarles, según comentaron. Piden ser reubicados en una zona en donde no tengan que volver a mudarse a causa de las inundaciones.
Nilsa Sánchez, profesora de la escuela Celsa Speratti, señaló que si el alumno no puede asistir buscarán la forma de que recupere las clases perdidas.