24 abr. 2024

¿Por qué la presidencia del Brasil es “pelota tatá” cuando viaja Temer?

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La presidencia del Brasil se convierte en una verdadera “pelota tata” para los que deben suceder al presidente Michel Temer cada vez que el mismo viaja, como el caso de este lunes, que vino a nuestro país a participar de la cumbre del Mercosur. Como el vecino país ahora no tiene vicepresidente, cuando no está Temer, le corresponde asumir al titular de Diputado, Rodrigo Maia, o al del Senado, Eunício Oliveira.

¿Por qué estos dos no quieren ser presidentes del Brasil ni siquiera un instante? Por precaución, dicen, porque les podría impedir presentarse nuevamente para sus respectivos cargos en octubre próximo. ¿Y qué hacen para no sentarse en Planalto en vez de Temer? Pues planean viajes: Temer sale del país, ellos también agarran un avión lo más rápido posible.

Por ejemplo, Maia ahora está en Portugal, mientras Eunício se encuentra de visita en Argentina. Por eso, la presidencia interina últimamente recae en la presidenta del Supremo Tribunal Federal (STF), Carmen Lucía, tercera en la línea de sucesión. Así ya ocurrió en abril, cuando Temer fue a Perú, mientras Maia volaba a Panamá y Eunicio se mandaba mudar al lejano Japón.

En caso que uno de ellos quedase en el ejercicio de la presidencia por algún periodo en los seis meses anteriores a las elecciones, solo podría competir por la Presidencia. Es decir, no podrían disputar otros cargos en los comicios de octubre, según una interpretación del artículo 14 de la Constitución brasileña, conforme explica hoy un artículo del diario O Globo.

Así las cosas, Carmen Lucía todavía volverá a ocupar la presidencia brasileña durante los próximos viajes que tiene el presidente Temer en su agenda, incluyendo una nueva visita al Paraguay el 15 de agosto para la asunción de Mario Abdo Benitez.