Cientos de negocios, carritos de comida rápida y bodegas abren solo en horas de la noche. La Avenida Quinta se llena de gente todos los fines de semana. Eran las 2 de la madrugada de ayer y numerosos hinchas de Cerro Porteño seguían sobre la Avenida Quinta de Asunción, a metros de la Olla Azulgrana, tras el empate de 1-1 ante General Díaz. Algunos autos estacionados cerraron el cruce de la calle México y sus ocupantes farreaban con canciones que “reventaban los parlantes”.
Los vecinos de la zona, cansados de no poder dormir a raíz de los continuos festejos hasta el amanecer, llamaron a la Comisaría 4ª Metropolitana para denunciar la polusión sonora.
Una patrullera fue al lugar y pidió a las personas bajar el volumen de la música. Los farristas accedieron a la solicitud, pero 15 minutos después de que los policías se retiraran, el “descontrol” siguió y los lugareños volvieron a denunciarlos.
“Mandé otra patrullera y los agentes intentaron dialogar con ellos, pero no entraron en razón porque estaban bajo efectos del alcohol. Cuando intentaron despejar la zona, las personas agredieron a los policías y se procedió al uso de la fuerza”, explicó el comisario principal Mario Medina.
Los inadaptados se unieron y enfrentaron a los uniformados con botellazos y pedradas. El parabrisas frontal del móvil policial se hizo pedazos. En la gresca, los agentes acertaron (en el muslo) con balines de goma a Jorge López (27), quien terminó detenido. Enrique Rodríguez (31) y Natividad Cáceres (25) también quedaron a cargo del Ministerio Público.