Con un nudo en la garganta don M.E. relató que días atrás que su nieto de 10 años fue llegando a su casa montado en su bici y con sus ropitas cargadas en una bolsa.
“Suele luego venir a pasar las vacaciones acá con nosotros, pero esta vez le noté raro, estaba triste”, dijo el abuelo.
Le preguntaron una y otra vez qué le pasaba, hasta que una tía decidió alzar la remera que tenía puesta. “Vimos que tenía rastros de haber sido brutalmente lastimado y cuando le preguntamos quién fue nos contó que su padrastro lo castigó”, recordó el señor.
Con mucha impotencia, contó que el niño es su primer nieto y como tal el más mimado. “Mi hijo se separó de la mamá, pero se hizo cargo económicamente de él, la mujer tiempo después se volvió a juntar y ahora ya tiene otro hijo con su nueva pareja”, explicó.
Ante lo ocurrido fueron a denunciar el caso a la Codeni de San Juan Nepomuceno, Caazapá, pero nada se pudo hacer. Según el pariente, la mamá llegó a la casa sorpresivamente y se llevó a la criatura.
A favor
Don M. señaló que ayer fue a la Fiscalía donde coincidentemente encontró a su nieto con su exnuera y un abogado.
“Se fueron como para que el chico declare a favor de su mamá, mi exnuera dijo que fue ella la que le pegó a mi nieto con una planta de inga, le defendió a su pareja”, señaló indignado.
El señor exigió que el niño sea entrevistado por una psicóloga y pidió ser el tutor, mientras se tramita el pedido de su hijo, quien a su vez quiere la patria potestad de la criatura.
Liz Silvero, encargada de la Codeni local, dijo que ella no recibió ninguna denuncia formal respecto al caso y que solo le comentaron el hecho por teléfono. El abuelo teme que el chico hasta se quite la vida, ya que asegura estar muy triste y con miedo.