Iteña asegura que tiene a su lado al hombre Ideal. Algunos califican de “výro chusco” a los que toman este tipo de decisiones.
“Hombres no son los que tienen muchas mujeres y usan pantalones”, dijo de manera tajante María del Carmen Aguayo, una mujer que hizo enloquecer de amor a un suizo. Tanto, que el hombre hasta decidió llevar su apellido.
La historia comenzó hace 20 años, cuando Adolf Mettler visitó el bar de la familia de María, en Itá. “Un día, él llegó y yo le atendí. Comenzamos a entablar conversación y así, tres semanas después, ya nos casamos”, recordó. Poco tiempo después, la pareja fue a vivir a Suiza.
Tienen tres hijos, de 20, 18 y 11 años; y según contó la iteña, su marido es un hombre muy especial. “Él lava, plancha, cocina, hace de todo; nos ayudamos mucho en las tareas de la casa”, afirmó. En el país europeo los hombres acostumbran usar el apellido de la mujer, que es algo normal y que, por sobre todo, facilita la realización de los trámites.
ADOLF METTLER DE AGUAYO
Adolf es uno de los 100 hombres que decidieron usar el apellido de la esposa en Paraguay. “Cuando llega un sobre para mi marido, su nombre va acompañado de mi apellido”, sostuvo María. Lamentó que en nuestro país siga existiendo el pensamiento machista, de que solo la mujer puede usar el apellido del marido. “Yo pienso que tiene que ser todo en igualdad de condiciones”, remarcó.