Liza Portillo, mamá de Fiorella, la niña que apareció luego de 4 años, se presentó esta mañana en el Juzgado de la Niñez de Capiatá. Negó, una vez más, que ella haya entregado a su hija a las personas que la criaron. Adelantó que va a demandar por difamación y calumnia a la abogada de la pareja, Gloria Bordón, quien la acusó de haber vendido a su hija.
“Ella dijo que yo entregué a mi hija, yo no les conozco a esas personas, primera vez que les veo”, aseguró. Además, mencionó que va a pedir la restitución de la niña, para que vuelva a vivir con ella. “Quiero tenerle otra vez conmigo”, expresó entre llantos.
La pequeña aún no se reencontró con la mamá, pues se encuentra en un hogar, resguardada.
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