Motociclistas, choferes de micros y hasta los policías no desaprovecharon la oportunidad de alzarse con la espumante bebida. Como dice el dicho, lo que cae de arriba, no golpea. “Hasta los policías alzaron en la patrullera las latas”, comentaban entre risas los taxistas apostados en la curva Manuel Ortiz Guerrero casi Caaguazú, de Ñemby. El jueves, un camión que llevaba un cargamento de cervezas Budweiser, hizo una maniobra brusca, aparentemente para esquivar una moto y cayó al suelo, porque supuestamente la carga no fue bien asegurada.
La mitad de la mercadería se desparramó, unas 6 paletas que contenían 480 “packs”. Según datos de la cervecería, serían más o menos 4 mil latas perdidas, entre las que fueron llevadas y las que se rompieron. “Todavía falta evaluar cuánto es la pérdida pero se aproxima a esos números”, dijo el asesor de Cervepar, Jorge Talavera.
Los vecinos aseguraron que este tipo de accidentes ocurren con frecuencia en la zona y que muchos ya llaman al lugar como la “curva de los regalos”. El encargado de la gomería “Los hermanos”, contó que hace poco a un camión que llevaba gaseosa le pasó lo mismo. “Montones de gaseosas se cayeron, acá los vecinos son rápidos, al rato ya llevaron todo”, dijo.
Rapiña
Blas Cuenca, vocero de los bomberos, dijo que los conductores vienen a alta velocidad y que como la curva es muy pronunciada ocurren estos accidentes. “La rapiña también es algo frecuente sobre todo cuando se trata de bebidas, la gente siempre se aprovecha”, manifestó.