Una mujer acusada de robo y que había sido atada por una turba a un árbol lleno de hormigas, murió por las picaduras, en un nuevo caso de linchamiento en un área rural de Bolivia.
CON SUS HIJOS
La madre, con dos de sus hijos, fue atada a un árbol nido de hormigas, conocido como “palo santo”, en el poblado de Caranavi, en la región de Yungas al norte de La Paz, tras ser acusados de ser ladrones de automóviles.
A los tres les fueron vendados los ojos e incluso hubo intención de quemarlos, pues les rociaron con gasolina, aunque la Policía llegó al lugar, en una zona boscosa, a tiempo de rescatarlos. Los tres fueron llevados con premura al hospital, ante la masividad de las picaduras recibidas.
Los linchados habrían soportado el padecimiento por varias horas.
POTENTE VENENO
Las hormigas que anidan en el “palo santo” son de la variedad Pseudomyrmex triplarinus. Poseen un potente veneno, que en Bolivia es utilizado incluso para tratar problemas de artritis.
En este caso, la cantidad recibida por la señora fue demasiada, ya que falleció camino al hospital.
“Es probable que las hormigas le hayan picado la tráquea, lo que le causó una inflamación y ya no pudo respirar”, señaló la abogada de la familia.
AUGE DE LINCHAMIENTOS
En 2013 se registraron 79 linchamientos o muerte de presuntos delincuentes en casos de “justicia por mano propia”. Según la Defensoría del Pueblo, en Bolivia se dan los índices más altos de linchamientos en Latinoamérica, después
de Guatemala.