Néstor Cañete, fiscal interviniente en la causa de violencia familiar contra el intendente de Luque, Carlos Echeverría, indicó que pese a que la denuncia fue retirada por Mercedes Zelaya, esposa del jefe comunal, ellos actuarán de oficio.
La denuncia ya está en el Ministerio Público y, según Cañete, no son buenas noticias para el político colorado. La ley que castiga la violencia familiar habla de que “El que, aprovechándose del ámbito familiar o de convivencia, ejerciera violencia física o psíquica sobre otro con quien convive o no, será castigado con pena privativa de libertad de uno a seis años”. Es decir, no existen medidas alternativas a la prisión, ya que la violencia familiar es un crimen.
Pruebas
Cañete dijo que solicitarán todas las pruebas para determinar si realmente el titular de la comuna garroteó a su señora. Una de ellas es un informe médico, practicado a Zelaya luego de la supuesta golpiza, en el Hospital San Lorenzo. Este documento será fundamental, según el fiscal.
La mujer será llamada a declarar el 17 de noviembre. En tanto, la hija menor de la pareja, que según la denuncia policial vio todo, sería sometida a un análisis psicológico.
“A mí, el Código me dice que solo necesito sospecha para formular una imputación, en ese caso, el intendente sería llamado a declarar. Esa sospecha se tiene que sostener con elementos de convicción. Estoy solicitando los elementos de investigación”, manifestó Cañete.