“Era un niño lleno de sueños, uno de ellos era llegar a ser un profesional para ayudar a su familia, que es muy humilde”, contó con mucho pesar Gloria Ozuna, tía del niño de 10 años que murió arrollado en la noche del jueves, cuando asistía a un pesebre viviente en el barrio San Roque de Caaguazú.
Con la voz quebrada, la familiar pidió a las autoridades que se haga justicia. El responsable del fatal percance fue identificado como Enzo Escobar. “Queremos que se investigue bien, no es la primera vez que causa un accidente, siempre luego pasa a toda velocidad y ahora le mató a mi sobrino”, lamentó la mujer.
Otro chico fue embestido por el vehículo y quedó en grave estado: se trata del primo de la víctima fatal. Eran inseparables y siempre jugaban juntos, según los familiares. Sus padres dejaron que fueran al acto tradicional creyendo que nada malo podría pasarles, pero no fue así. “Nunca pensamos que esto podría ocurrir a la familia”, dijo Ozuna.
Alberto Garay, padre del chico fallecido, señaló que no estaba en su casa a la hora del percance. “Me enteré por mis hijos, yo estaba trabajando y me llamaron para decirme que mi hijo se murió. Estoy destrozado, no puedo creer lo que le pasó”, contó, muy consternado.
La otra víctima del choque tiene 11 años, sigue hospitalizado y su cuadro es grave, indicó Zunilda Ozuna, madre del pequeño. “Queremos justicia, mi hijo está luchando por su vida, ese loco merece 20 o 30 años de carcel. Pido a Dios y a la Virgen que mi hijo resista y que ese muchacho loco (por Escobar) se vaya al infierno”, dijo.
Familiares del sobreviviente apelan a la solidaridad, ya que son de escasos recursos y los medicamentos son costosos. Si desea ayudar, comuníquese al (021) 125 505