Sandra (nombre ficticio), mamá de tres alumnos del Colegio Saturio Ríos de San Lorenzo, se acercó ayer hasta la institución para inscribir a sus hijos al año lectivo 2018; pero cuando llegó, se encontró con una no tan agradable sorpresa.
En cada puerta había encargados de la comisión de padres haciendo una especie de “peaje”, pidiendo el pago de un “aporte voluntario”. Le explicaron que, por hijo, el pago era G. 150.000; a partir de dos hijos, G. 100.000 por cabeza; y, si era alumno nuevo, ¡200.000!
“Dicen que el aporte es voluntario, pero se instalan ahí y, si no pagás, te hacen dramas”, contó la mujer. Añadió que todos los años abonan por nuevos “proyectos” y colaboran en diversas actividades a las que obligan a sus hijos a asistir, por lo que no saben en qué se usa el aporte. “Este año dicen que el dinero es para un generador propio”, dijo.
ES “TIERRA DE NADIE”
Sonia Escauriza, directora de Niñez y Adolescencia del MEC, señaló que, por resolución, la inscripción en instituciones públicas debe ser gratuita y automática; aún así, hay colegios que hacen caso omiso a esto. “Es el ‘modus operandi’ de las Asociaciones de Padres. Ya les dijimos que no tienen que condicionar para la inscripción”, refirió, por lo que tomarán cartas en el asunto. Agregó que el centro educativo actualmente es “tierra de nadie”, ya que se encuentra sin director en las tres instituciones que comprende, debido a una intervención.