Cajas y más cajas de cigarrillos fueron incautadas durante un control del Departmento Técnico Aduanero de Vigilancia Especializada y agentes de Delitos Económicos de la Policía, en Hernandarias. De pronto, se llevaron gran sorpresa al encontrar entre los productos aparentemente ingresados de contrabando gran cantidad de... ¡cabello!
Al menos 90 kilos distribuidos en bolsas de 30 kilos fueron hallados por los intervinientes. Pero esto no es casualidad, explican expertos en el área de la compra y venta de este producto capilar, que hace al menos 20 años se puso en vigencia y no ha dado respiro a su auge. Tanto, que cada vez más gente se dedica al rubro, pero muy pocos de forma legal, afirma Francisca Mazacotte, una de las empresarias del cabello. “Es una moda que vino y se quedó”, aseguró.
Francisca desde hace casi 20 años se maneja en ese mundo y, según contó a EXTRA, incluso llegó a mandar mercadería por lotes a Estados Unidos, mercado para el que vendía por lo menos 200 kilos en un solo envío.
los preferidos son de la “campaña”
Francisca afirmó que el cabello proveniente de personas del interior del país es más cotizado, debido a que tiene menos químicos. “Tiene un brillo especial, es más suave y tiene totalmente otra textura”, comparó.
Ella y 15 comerciantes especialmente entrenados recorrían el país en busca del preciado pelo. “No es tarea fácil, hay que ir al interior para saber cómo es”, aclaró, añadiendo que traían por toneladas y de la mejor calidad.
“Hay miles de anécdotas sobre esto. Una vez nos fuimos a la zona de la ribera del río Paraná. Ahí la gente no tenía siquiera para comer. Empezamos a comprar el cabello a la gente y es como una cadena. Inmediatamente la señora de la despensa mató un chancho y vendió todita la carne”, relató la mujer. Agregó que el cabello se compra a partir de 20 centímetros de largo y genera buena paga.