14 dic. 2024

Español entró a casa de su ex, la tomó de rehén y casi la mató

M. fue a España a trabajar. Allí conoció a Antonio Fernández Moreno y decidió darse otra oportunidad. De este hecho pasaron 10 años. Hoy, la mujer maldice el día en que el español se cruzó en su camino, ya que poco a poco su vida se fue convirtiendo en un infierno.

Los celos enfermizos y la violencia fueron los protagonistas constantes del vínculo sentimental. “Siempre fue una relación tormentosa”, contó la hija menor de la afectada. Es por ello que M. decidió huir del país europeo y regresar a su querida Capiatá. Pero la obsesión de Fernández fue más fuerte. Tanto, que dejó España y arribó a Paraguay detrás su ex.

“Él llegó en julio pasado y le convenció otra vez a mamá para que regresen, jurando que había cambiado”, recordó la joven de 23 años. Pero el cambio duró poco. Los celos, las amenazas y los golpes nuevamente aparecieron.

“Varias veces lo denunciamos, hasta una orden de alejamiento tiene pero eso no le importó”, señaló la chica, quien vivió en carne propia el calvario de la madre.

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Al borde de la muerte

M. decidió alejarse de manera definitiva y esto enfureció a Antonio quien, el viernes, fue hasta la casa ubicada en el barrio San Miguel de Capiatá con el objetivo de acabar con ella. “Mamá entró a bañarse, se envolvió con una toalla y salió al patio a colgar la ropa. Allí el tipo saltó la muralla y con una pistola le apuntó en el pecho”, relató.

La joven estaba en su pieza cuando, de repente, alzó la mirada y vio en el pasillo que su mamá caminaba despacio al lado del hombre, que constantemente la apuntaba con el arma de fuego. “No hagas nada, no grites, yo me voy a ir con él, me dijo mamá”, recordó la muchacha.

Entraron a una pieza y, en un descuido, la chica se avalanzó sobre Antonio. En ese instante entró el hermano mayor y junto a la madre lograron despojarlo del arma. Finalmente fueron a pedir ayuda y llegó la policía local. Según la hija de la víctima, Fernández tiene antecedentes por homicidio en su país de origen. El fiscal Benjamín Maricevich imputó al hombre por violencia doméstica y tenencia ilegal de armas.