FRÍO COMPLICA LA SALUD EN LOS PUNTOS CRÍTICOS INUNDADOS
Crudo testimonio de un padre cuya hija tuvo apendicitis.
BAJO AGUA
El paisaje desolador que presenta la mayoría de los distritos de Ñeembucú donde 30.000 familias se ven afectadas por las inundaciones hace meses.
EN ZAPATILLAS. Niños de la Escuela 12 de Junio de Misiones.
En medio de las complicaciones propias de una inundación, también se ve afectada la salud. Celso Molinas, un humilde granjero, vivió en carne propia los estragos de la naturaleza y la falta de médicos en su natal Tacuaras, Ñeembucú.
El hombre no tuvo más remedio que trasladarse hasta Pilar para que su hija de 10 años fuera atendida por un posible cuadro de apendicitis. “En Tacuaras ya nada se puede hacer, ni ir al doctor. Tuvimos que irnos en tractor hasta Cerrito y de ahí en ambulancia hasta Pilar”, lamentó el lugareño.
Varios cuadros gripales y diarreicos también están a la orden del día en las zonas inundadas de Misiones, ahora con mayor frecuencia donde se siente las bajas temperaturas.
Para paliar un poco la emergencia en este sector del país, una comitiva de 12 médicos y personal de enfermería de la VIII Región Sanitaria ya se encuentran atendiendo a los pacientes que necesiten una pronta atención, en los puntos de salud.