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Doña murió al caer del micro: dicen que chofer iba muy rápido
Conductor se defendió y dijo que no vio a la pasajera.
De mal en peor el servicio del transporte público, aparte que le hacen esperar por horas a los pasajeros, vienen apurados; alzan y bajan a la gente de manera poco amable.
Ayer, doña Castorina Benítez de Bogado (61), de Laurelty, Luque, encontró la muerte a bordo de un micro interno chatarra: Línea 9, empresa Lucerito del Alba.
La pasajera agonizó unos minutos, golpeó su cabeza por el cordón de la vereda.
La tragedia ocurrió en el barrio San Juan, sobre la calle Los Laureles de Sanlo.
Según los testigos, el chofer manejaba a toda bala y en una esquina, para doblar, hizo una maniobra brusca y la pasajera salió volando del micro porque la puerta estaba abierta.
Su caída fue terrible, según los pasajeros. Comentaron que la doña se sentó a esperar el micro porque no venía y cuando por fin apareció casi le dejó, los pasajeros silbaron al chofer para alzar a la doña.
SE SUBIÓ POR ATRÁS
En tanto el conductor, Ulises Benjamín González (20), un poco nervioso, dijo que la pasajera se acababa de subir, lo hizo por atrás, él siguió su camino, le dio paso a un auto. “Ella se subió todo, no se sentó todavía y se cayó”, dijo el conductor.
La doña fue reanimada por bomberos, pero ya no tenía signos de vida.
La puerta estaba atada con cable
Doña Castorina se subió apúrope en el micro, por su edad misma y sus cositas en la mano, cuando estaba tratando de sentarse, el colectivo dobló la esquina de manera muy rápida, ella perdió el equilibrio y se cayó.
La gente dijo que los choferes nunca cierran la puerta trasera, sin embargo, en este caso, tampoco lo podía hacer ya que la misma estaba ataca con una trenza de cables. El sistema de abrir y cerrar no funcionaba.
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