Por: Erika Vera.
Se debe incentivar a los niños a consumir alimentos saludables. Lo ideal es que coman un poco de todo: carnes, huevos, frutas y hortalizas, ya que así obtendrán nutrientes necesarios como vitaminas, hierro y minerales, fundamentales para una buena salud.
Que les guste comer saludablemente se puede lograr de diferentes maneras.
En primer lugar, hay que jugar con los colores y con la presentación de las comidas. Un buen ejemplo son los tomates rellenos, que pueden hacerse de pollo y verduras.
Otra forma de hacer atractiva la comida es prepararla de diferentes formas.
Cocinar con ellos también ayuda, para que se interesen más y se sientan protagonistas de la elaboración de sus alimentos.
Es importante no obligar ni castigar al niño si no come todo su alimento: al hacer eso se refuerza su conducta negativa con respecto a la comida.
Al preparar los alimentos es necesario evitar el exceso de sal y limitar el consumo de azúcar y caramelos. La gaseosa debe limitarse, cambiándola por jugos de frutas naturales y agua. Lo importante es recordar que los padres deben ser siempre el ejemplo.